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ASUNCIÓN. La sesión extra para la que fueran convocados los senadores a fin de tratar el voto de censura al presidente de la Conajzar, José Ortiz, quedó finalmente sin quórum evitando así una presunta jugarreta del oficialismo, de la mano del presidente Óscar Salomón, para salvar al funcionario.
Para aprobar el voto de censura, el pleno necesitaba mayoría absoluta de dos tercios (30 votos); sin embargo, la sesión empezó con apenas 25 presentes, por lo que Juan Carlos Galaverna pidió la postergación de la misma, advirtiendo que de continuar se blanquearía al funcionario. Para esto también se necesitan 30 votos, que no se obtuvieron en la votación nominal planteada por Lilian Samaniego, por lo que la sesión continuó, aunque ya era evidente que no podrían censurar a Ortiz.
Al no conseguir la postergación, Enrique Bacchetta fundamentó el voto de censura en contra del titular de la Conajzar, advirtiendo que el resultado de la sesión sería el blanqueo del mismo.
Sin embargo, quienes sí estaban de acuerdo con censurar al funcionario decidieron retirarse de la sesión para no avalar con su presencia la situación, lo que hizo que, finalmente, a Salomón no le quedara más remedio que postergarla. Antes de retirarse, Galaverna dijo el titular de la Conajzar era testaferro del presidente de la cámara, por lo que, tanto a él como a Lilian Samaniego, les urgía salvarlo.
