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En una nota dada a conocer a través de su embajada en Uruguay, concurrente con nuestro país, el gobierno de Irán manifiesta su profunda denuncia y malestar por la actitud de autoridades nacionales en el caso del avión venezolano-iraní.
La denuncia es contra el ministro del Interior, Federico González, y el de la Secretaría Nacional de Inteligencia (SNI), Esteban Aquino, quienes, supuestamente, habrían emitido declaraciones anti-iraníes y de marcada influencia sionista y estadounidense.
González se defendió de estas acusaciones y aseguró en Radio 1000 que ni él ni Aquino hablaron en ningún momento de una persona, gobierno o religión en particular.
“Al tenerse una sospecha de una posibilidad de riesgo contra la seguridad del Estado, se hicieron las consultas correspondientes, siendo las respuestas las que confirmaron los indicios que se tenían, de que la aerolínea que aterrizó en suelo paraguayo el pasado 13 de mayo había sido sancionada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos ya varios años atrás”, explicó.
Añadió que “a través de esas consultas que se hicieron, se tomó conocimiento de que los tripulantes de la aeronave formarían parte de una lista de supuestos terroristas, de acuerdo a información proporcionado por los gobiernos de Estados Unidos y de Israel”.
“Se obró como corresponde, es nuestra misión y nuestra obligación tomar las medidas y alertar ante cualquier riesgo contra la seguridad del Estado, y hacer esta alerta también a organismos de seguridad de otros países de nuestra región y de otras regiones del mundo, por el riesgo implícito; eso es lo que se hizo y se va a seguir haciendo toda vez que corresponda, cuando la seguridad del Estado esté en riesgo”, concluyó.
