ADN Digital
Artículos relacionados
La gran cantidad de listas de candidatos al Senado lo que hará será beneficiar a los partidos tradicionales que mantendrán sus votos duros, mientras que los independientes se dispersarán entre muchas opciones diferentes. El bipartidismo no solo se nota en las chapas presidenciales, sino que se verá más fuerte que nunca en la conformación de las cámaras del Congreso.
ASUNCIÓN.- Si sectores políticos o independientes que no responden a los partidos tradicionales hubieran pretendido hacer una buena elección legislativa, debieron haberse unido y conformado listas conjuntas, a fin de que los votos de la ciudadanía que pretende un recambio en el Congreso no deban dispersarse como, efectivamente, lo harán debido a la múltiple oferta electoral novedosa.
Esto es algo que parecen no entender ciertos medios de prensa y sectores políticos que apuestan a la multiplicidad de propuestas, como si no se dieran cuenta de que esta solamente beneficia a los partidos tradicionales, que mantienen su caudal de votos y que tienen en sus filas a quienes no piensan dejarse seducir por nuevos vientos puesto que consideran que la experiencia que tienen sus sectores es la que conviene para el correcto funcionamiento del Poder Legislativo.
De hecho, esto ya ha quedado demostrado en varias ocasiones, anteriormente, donde los inexpertos legisladores tuvieron que pagar derecho de piso ante la experiencia y el movimiento de cintura de quienes ya llevan varios años en el mundo legislativo y se conocen todos los intríngulis del cargo.
El argumento que utilizan algunos es que en las listas de los partidos tradicionales hay candidatos seriamente cuestionados o imputados por causas judiciales, y que la ciudadanía prefiere optar por gente fresca, quizá sin trayectoria, pero también limpia de entuertos y negociados.
Repetimos, si eso era lo que pretendían, debían haber logrado consenso en sus listas, de manera a no dispersar sus votos. Pero, además, debieron haber elegido mejor a quienes pretenden mostrar como alternativas, porque si son como Camilo Soares, por ejemplo, que en su fugaz paso por la administración pública batió todos los récord en cuanto a corrupción, y está imputado por negociados que causaron grave perjuicio a las arcas del Estado.
Ya sea por uno u otro motivo, tal como acabamos de explicar, ratificamos que la multiplicidad de ofertas lo que hará será confirmar el bipartidismo tanto en las cámaras del Congreso como en las juntas departamentales.
