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CIUDAD DEL ESTE. Una niña indígena de apenas 10 años dio a luz en un sanatorio privado de Ciudad del Este en la mañana de este domingo. El bebé nació con 2,700 kilogramos. El parto, resultado de un abuso sexual, llevó al Ministerio Público a iniciar una investigación sobre el caso.
El médico a cargo de la intervención, el doctor Petronilo Sosa, destacó la importancia del acompañamiento prenatal brindado por el Hogar de Niños Santa Elena, el cual permitió gestionar adecuadamente el embarazo de alto riesgo. El nacimiento se llevó a cabo mediante una cesárea debido a la estrechez pélvica de la niña, siendo imposible un parto vaginal a su corta edad, según explicó el profesional. A pesar de las complicaciones, tanto el bebé como la madre se encuentran en buenas condiciones de salud.
“Fue un embarazo de muy alto riesgo, pero con el acompañamiento no hubo complicaciones. Se tuvo en cuenta todas las posibles complicaciones, según los protocolos. Fue una cesárea. Por una pelvis muy estrecha, es imposible un parto vaginal a esa edad”, detalló el médico. “El bebé nació con dos kilos 700 gramos. Está con respiración espontánea, buena vitalidad, con 37 semanas, llegó a término”, acotó.
La fiscal de turno, Viviana Coronel, confirmó la apertura de una investigación en otra unidad fiscal debido a la naturaleza del caso, que implica un presunto abuso sexual.
Mencionó que la niña fue ingresada de urgencia al sanatorio y trasladada a la sala de cirugía para la cesárea, bajo la custodia de la responsable del hogar, Elena Tintel.
