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La tirria que le tiene cierto sector de la oposición a la fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez, es tan intensa que no soportan que continúe en el cargo aunque su mandato vence en pocos meses más, en marzo del año próximo.
Por eso se empecinaron en destituirla vía juicio político y debe ser la única en el cargo que 4 veces fue sometida a escrutinio a través del libelo acusatorio que presentaron en Diputados, pero ninguna de esas veces el proceso superó siquiera la acusación.
Ahora, el senador Pedro Santa Cruz, escudero de Desirée Masi (PDP), la mayor enemiga de Quiñónez, aprovechando su carácter de miembro del Consejo de la Magistratura, solicitó que se adelante el proceso de salida de Quiñónez, quien termina su mandato en marzo del año próximo. Para ello, planteó que ya en octubre se haga el llamado correspondiente para conformar la terna de candidatos.
Aunque su argumento es que adelantando se evitará que el proceso de selección coincida con las internas partidarias, porque esto partidizaría la elección del sucesor de Quiñónez, aunque la verdad es que quieren evitar como sea que termine su mandato. Sacarla por lo menos un mes antes de que este venza les haría sentir satisfechos.
