ADN Digital
Artículos relacionados
ASUNCIÓN.- Diputados, como cámara de origen, fue convocada para el martes a la mañana a fin de tratar el veto parcial del Poder Ejecutivo al Presupuesto General de la Nación del 2018. Para lo mismo, el Senado se reunirá también el martes, pero a la tarde. Para que las objeciones del gobierno fueran rechazadas, tienen que tomar dicha decisión ambas cámaras. Si una no lo hace, la Ley no podrá entrar en vigencia, tal como ocurriera el año pasado.
Ni bien conocido ayer el veto parcial del Ejecutivo al PGN del año próximo, el presidente de la Comisión Permanente del Congreso, el senador oficialista Derlis Osorio, convocó a ambas cámaras para tratar el tema en sendas sesiones extraordinarias, Diputados (cámara de origen) a la mañana, y el Senado (revisora) a la tarde.
Las cámaras solamente podrán analizar los puntos que fueron objetados por el Ejecutivo, y aceptar dichas objeciones o rechazarlas, para lo cual necesitan, cada una, mayoría absoluta de votos (Diputados: 41.Senado: 23). Para que el veto fuera rechazado y quedara sancionada la ley tal como quedó redactada por el Congreso, se necesita que ambas cámaras obtengan la mayoría necesaria para ratificarse. De lo contrario, el veto quedará aceptado y la ley sin vigencia.
Esto es exactamente lo que ocurrió el año pasado, cuando el Ejecutivo vetó parcialmente la Ley aprobada porque las modificaciones del Senado la hicieron inaplicable. Las cámaras no tuvieron mayoría para aceptar el veto y el país se quedó sin Ley de Presupuesto para el 2017, por lo que sigue vigente la del 2016.
Aunque nadie quiere que se repita la experiencia, hay un gran temor de que suceda, puesto que se están dando los mismos pasos que el año pasado. La ley había quedado sancionada con las modificaciones del Senado, que inflaron demasiado el proyecto que había enviado el Ejecutivo, y es justamente eso lo que fue objeto de veto.
Luego del anuncio del veto, la ministra de Hacienda, Lea Giménez, solicitó al Congreso en conferencia de prensa, dejar de lado cuestiones electorales y tomar con seriedad el análisis del veto parcial.
Aseguró que el Ejecutivo no desconoce las reivindicaciones salariales necesarias y por ello se reunió con representantes del Ministerio de Educación y de Salud, consensuando un porcentaje de incremento.
“Un cuarto de los ingresos tributarios adicionales irán a Educación para pago de salarios, esto era lo financieramente sostenible para no afectar a los sectores sociales vulnerables. En salud se propuso trabajar en las inequidades existentes, pero estas hoy se exacerban aún más”, señaló.
