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A pesar de haber jugado 30 minutos contra 10 hombres por la expulsión de Pedro Benítez, Olimpia no pudo remontar el empate 1-1 con el que terminó la primera etapa, y dejó escapar dos puntos vitales. Roque Santa Cruz volvió a anotar y empató Marcelo Báez para Libertad.
ASUNCIÓN.- Como todos los clásicos, y este no fue la excepción, empezó a todo ritmo y se fue desdibujando con el correr de los minutos, mostrando cada cual a su turno, sus luces y sus sombras, así como el contraste de los colores de ambas camisetas. Y muy al estilo de los equipos de Jubero, Olimpia empezó a mil por hora y dio la impresión de que esa jugada de gol que sirvió para la apertura, vino del laboratorio del DT de los Decanos.
Fue todo demasiado exacto, demasiado perfecto como para ser casualidad: la pelota que recoge Julián Benítez con esa punzante habilidad que lo caracteriza, corre unos metros y presiente el adelantamiento del capitán, Salustiano Candia, por su sector, y coloca la pelota a espaldas de Ángel Martínez a la que llega Candia, ganándole la pulseada al matungo Alcaraz y coloca el pase frente al arco, allí donde expectante, atropellaba Roque Santa Cruz, para arrojarse al piso y empujar la pelota, lejos del alcance de Muñoz.
Presagio de negros nubarrones para la defensa liberteña totalmente sorprendida. Pero duró lo que dura una tormenta de verano, muchos truenos, muchos relámpagos pero poca agua. Y cuando unos segundos después volvió a aparecer Santa Cruz, milagrosamente Rodrigo Muñoz “se lesionó” y tras perder un par de minutos atendido en el piso se reanudó el partido. La pausa sirvió para atenuar la furia olimpista y recuperarse Libertad.
Así poco a poco comenzó a equilibrar en la mitad de la cancha, “Patito” Aquino se adueñó de su sector, perdió trascendencia Benítez, Roque y Mendieta, muy lejos, perdieron también contacto con la pelota, mientras aparecía Marcelo Báez por la derecha, creando huecos, conectándose con “Sasá” y arrimando peligro y poniendo en discusión la victoria parcial. Y le llegó su cuarto de hora a Báez; picó, eludió a Rodi Medina, paso de largo Rolín y con el arco a la vista colocó la pelota lejos de Barreto. Habían pasado apenas 23 minutos de juego.
Pero la etapa inicial no arrojó más emociones que esas, y la entrada de Bareiro en vez de Miers, le dio otra cara a Libertad que arrancó la etapa de fondo con mayor empuje, y una búsqueda más ambiciosa de la victoria. Se sucedieron las preponderancias, y entre Muñoz primero, y Barreto después se las agenciaban para mantener el marcador empatado 1-1.
A los 22 apareció de nuevo Báez y tras eludir a un par de defensores intentó hacer lo propio con Barreto, pero una vez más el golero sacó las castañas del fuego. Y en el contraataque, “Ganso” comete una falta, se gana la segunda amarilla, y Libertad queda con 10. A 20 minutos del final, comenzaba otro partido. Entra Maurito por Mendoza, y Fredy en vez de Villalba a ver si lograban la patriada por el lado olimpista. Y por el gumarelo, Osmar Molinas entró a reforzar la defensa y Dionicio Pérez a intentar el milagro. Pero no hubo ni lo uno ni lo otro. Se fue el partido con los olimpistas defraudados, los liberteños contentos y los aborígenes, chochos de la vida…
DETALLES DE LA JORNADA
Cancha: estadio Manuel Ferreira. Árbitro: Jorge Mercado. Asistentes: Eduardo Cardozo y Milciades Saldívar. Cuarto árbitro: Óscar Velázquez. Goles: PT: 3’ Roque Santa Cruz (O) y 23’ Marcelo Báez (L). Amonestados: Jorge Mendoza, Hernán Villalba (O); Pedro Benítez y Marcelo Cañete (L). Expulsado: 23’ ST: Pedro “Ganso” Benítez (L).
OLIMPIA: Diego Barreto; Rody Ferreira, José Leguizamón, Alexis Rolín y Salustiano Candia; Jorge Mendoza (Mauro Caballero), Hernán Villalba (Fredy Bareiro), Cristian Riveros y Julián Benítez; Roque Santa Cruz y William Mendieta. DT: Fernando Jubero.
LIBERTAD: Rodrigo Muñoz; Ángel Martínez, Antolín Alcaraz, Pedro Benítez y Sergio Vergara; Marcelo Báez, Iván Ramírez, Sergio Aquino y Andrés Miers (Antonio Bareiro); Marcelo Cañete (Osmar Molinas) y Santiago Salcedo (Dionicio Pérez). DT: Eduardo Villalba.
