ADN Digital
Artículos relacionados
CIUDAD DEL ESTE.- El padre de una menor de 8 años, víctima de abuso sexual, remitió una conmovedora carta a la jueza Penal de Garantías n° 5 de Ciudad del Este, Cinthia Garcete, en cuyo juzgado se tramita la causa. Le pidió que se aparte del caso por su “criticada, cuestionada y desteñida labor” que permitiría que el presunto autor, el expolicía y padrastro de la niña, José María González Marecos, quede impune.
El hombre, con las iniciales M.N.R.S., le remitió una nota a la magistrada, suplicando que se aparte de la causa en la que se investiga el caso de coacción sexual y abuso sexual en niños. De acuerdo con los datos, en forma llamativa, Garcete se aferra a la causa, aunque ya fue recusada en dos oportunidades, tanto por los representantes de la querella, como por el padre de la víctima.
“No confío en su trabajo por sus nefastos antecedentes, como así también le hago saber de mi odio y resentimiento hacia su persona, los cuales se originaron desde el momento en que me percaté de sus intenciones de beneficiar al procesado”, refiere un párrafo del escrito.
Agrega: “Quiero dejar en claro que en mi carácter de ciudadano paraguayo y padre de una menor violada, tengo el irrestricto derecho a desconfiar fuertemente de una magistrada que firma resoluciones que brindan impunidad y blindaje a políticos, quienes se ven involucrados en casos de proxenetismo de menores”.
Refiere además que su exesposa, madre de la niña y actual pareja del expolicía procesado, alardea que en la audiencia preliminar la magistrada otorgará el cambio de calificación al procesado, para luego favorecerlo con medidas sustitutivas a la prisión. Además de temer por la integridad de la menor e incluso del padre, teniendo en cuenta los antecedentes de amenaza, hay posibilidad de que el exagente huya del país, según refiere.
De acuerdo a las denuncias, el que estaría articulando para que González Marecos sea beneficiado es el esposo de la magistrada, el también abogado Luis Alberto Giménez, quien supuestamente actúa como nexo.
Según los antecedentes y la declaración de la pequeña en Cámara Gessel, el padrastro abusaba sistemáticamente de ella desde los 8 hasta los 11 años, hasta que finalmente la niña contó a su profesora lo que estaba ocurriendo. Su padre radicó la denuncia ante el Ministerio Público, pese a la oposición de la madre, quien defiende al presunto abusador.
