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En el distrito de Presidente Franco causó polémica el entierro de difuntos en la que sería la vereda del cementerio. Sin embargo, el encargado del camposanto, Gaspar Adorno, aseguró que los cuerpos fueron sepultados dentro del inmueble. De todos modos, el hecho denotó la necesidad imperante de que el cementerio cuente con un cercado perimetral. Los vecinos también temen que durante las lluvias, el raudal arrastre la tierra y deje al descubierto los ataúdes instalados a metros de la calle.
PRESIDENTE FRANCO. El hecho desató un encendido debate entre vecinos y en las redes sociales. Los lugareños, aseguraron que los cuerpos fueron sepultados en plena vía peatonal, dado que el camposanto se encuentra totalmente expuesto, y sin un cercado perimetral.
Gaspar Adorno, responsable del cementerio municipal, ubicado en el km 9 Monday de esta ciudad del Alto Paraná, aseguró que las tumbas no fueron instaladas en la vereda, y que el lugar corresponde aún al inmueble destinado para el camposanto.
“La gente piensa que es la vereda, pero estamos seguros que no es así. Ante la denuncia, vinieron los funcionarios municipales a hacer la medición, y se comprobó que tiene la dimensión suficiente, a tres metros del cordón de la calle”, expresó el trabajador.
Adorno insistió que aún queda espacio para 150 tumbas más, y que una vez que se llenen dichos lugares, se deberá cerrar el cementerio, ante la total ocupación. “Que la gente no se preocupe, una vez que se llene ese espacio, vamos a cerrar el cementerio, y no vamos a utilizar la vereda para enterrar a los muertos”, insistió.
Por otro lado, los vecinos manifestaron que urge la construcción de una muralla para aislar el camposanto. Afirmaron que se vuelve sumamente desagradable observar las sepulturas al caminar por las calles, y que con una muralla se bloquearía la vista a los sepulcros.
Al ser consultado Adorno, manifestó que aún no existe intención de la Municipalidad de disponer la construcción del cercado, dado que la Comuna se encuentra con varias deudas dejadas por administraciones anteriores.
“El intendente está solucionando muchas deudas, por eso por ahora es imposible la construcción, pero cuando se lleve a cabo, vamos a dejar tres metros de vereda, como corresponde”, insistió el responsable del cementerio. Asimismo, aseguró que la construcción del paseo peatonal se hizo de manera tal que el raudal no arrastre la arena depositada por sobre las tumbas.
ROBOS
Los visitantes del cementerio también reclamaron la imperante necesidad de una muralla que rodee el cementerio, dado que delincuentes ingresan al lugar para robar cualquier objeto de valor. Asimismo, es utilizado por los borrachos, quienes usan los techos de algunas sepulturas, para quedarse dormidos en el lugar.
