COREA DEL NORTE.- Pyongyang calificó de “ridículas” las críticas de Estados Unidos sobre la situación de los derechos humanos en el país, a pocas semanas de un encuentro entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y el líder norcoreano Kim Jong Un.
En su informe anual sobre los derechos humanos en el mundo, el Departamento de Estado estadounidense acusó la semana pasada a Corea del Norte de cometer todo tipo de violaciones de los derechos humanos con el aval del gobierno.
El estudio cita ejecuciones extrajudiciales, actos de tortura, represión de los disidentes y secuestros en el extranjero, que calificó como “violaciones flagrantes de los derechos humanos”.
En las últimas semanas, Pyongyang se había mostrado inhabitualmente reservado en sus habituales críticas contra Seúl y Washington y calificó en ocasiones sus acciones como destinadas a “relajar la atmósfera para el diálogo” antes de las cumbres con Moon y Trump.
Sin embargo, el régimen de Corea del Norte respondió al informe del Departamento de Estado denunciando que “calumnia brutalmente” al país y afirmó que Estados Unidos es un “semillero” de las violaciones a los derechos humanos donde la cultura de las armas es “como un cáncer”.
Washington se autoproclamó “juez de los derechos humanos”, fustigó la agencia.