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El designado próximo ministro de Educación Luis Ramírez comentó que implementará un programa que haga que los niños entiendan lo que leen, además de la urgente respuesta que necesitan 12 mil aulas que están en ruinas.
Ramírez, futuro ministro del MEC en el gobierno de Santiago Peña, es psicólogo y orientador vocacional y tiene una trayectoria muy respetada por varios sectores vinculados a la educación.
En una entrevista televisiva, comentó que “el presidente Santiago Peña me dijo, yo voy a liderar los proyectos educativos y quiero que me acompañes para desarrollar los proyectos educativos; o sea, él va a ser el piloto y yo el copiloto”.
“El mayor y gran desafío que lleva al menos 10 años sin ser atendido es la infraestructura educativa. Estamos previendo una estrategia dividida en tres niveles”, explicó.
El primero, el más directo. “Por ejemplo, se rompe una ventana y no vamos a hacer una licitación para que una empresa de Asunción se vaya a arreglar una escuela de Concepción. Tenemos que tener la posibilidad de hacer transferencias para que puedan reparar”, manifestó.
El segundo nivel es el intermedio e involucrará a los municipios y a las gobernaciones para las reparaciones necesarias y de una envergadura mayor.
El tercero y más amplio será la construcción de escuelas modelos, en donde ingresará el MOPC en la ejecución, pero con las instrucciones de la Dirección de Infraestructura del MEC, que hoy cuenta con menos de 10 encargados.
Al referirse a los estudiantes, Ramírez manifestó que instalará “lo antes posible, un programa educativo que ayude a los niños a comprender lo que leen. La falta de lectura comprensiva es un problema que condena a quien lo padece, a no poder entender ninguna de las demás ciencias”.
