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ASUNCIÓN.- Hallado culpable de un millonario desvío de fondos, fue condenado a diez años de prisión Rubén Darío Quesnel, extitular del Instituto Nacional del Indígena (INDI). Además fue multado por las chicanas que dilataron el proceso.
A más de la cárcel, se le aplicó la prohibición de ocupar cargos públicos por cuatro años y los 50 días de multa por ser declarado litigante de mala fe, por las chicanas.
Mientras tanto, Marlene Mendoza, exadministradora del ente, fue condenada a seis años de cárcel, mientras que; Éver Otazo, funcionario del Indi; y Óscar Viera, expresidente de la Fundación Reforeast Parm fueron condenados a 3 años 6 meses, y 2 años 6 meses respectivamente.
La causa fue por la desaparición de G. 3.127 millones durante la administración Quesnel al frente del Indi, dinero que debía ser destinado a la compra de tierras para las comunidades indígenas Yakye Axa y Sawhoyamaxa en el Chaco paraguayo.
Quesnel ya había sido condenado anteriormente a seis años y medio de cárcel por venta irregular de tierras que también pertenecían a comunidades indígenas. Y hay que recordar también que Quesnel había involucrado al expresidente de la República, Federico Franco y a su hijo, Freddy Franco, en la desaparición de la mencionada suma de dinero. Quesnel dijo que recibió la orden del entonces mandatario para entregar la suma a la organización Reforest Par.
En ocasión de una declaración ante el fiscal Anticorrupción, René Fernández, en su relato, salpicó al entonces presidente Federico Franco y a su hijo Freddy Franco. De hecho hubo prueba de un constante contacto telefónico entre Freddy Franco y Rubén Quesnel, en los días en que se sustrajo el dinero.
