ASUNCIÓN. El Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave) intensifica las actividades preventivas, que comprenden jornadas de capacitación, así como trabajos en conjunto con técnicos de la Dirección de Extensión Agraria, con quienes se realizan muestreos en zonas de producción.
De acuerdo con los análisis, el virus rugoso del tomate está ausente en el país, pero podría darse su aparición en el campo. “Estamos intensificando los controles en las Oficinas de Punto de Inspección, principalmente en la frontera con la Argentina, para determinar la presencia o no del virus, y en caso de detectarse frutos con síntomas severos, estos serán rechazados, debido a que esta enfermedad afecta la calidad, atendiendo a nuestras normativas vigentes”, afirmó Pastor Soria, titular de Senave.
Señaló que se recomendó a los importadores a que tomen los recaudos necesarios durante las operaciones comerciales, verificando en origen la calidad y sanidad, para no tener inconvenientes en frontera ante un potencial rechazo.
El virus rugoso es una amenaza para tomates y locotes, por lo que instan a proteger los establecimientos implementando protocolos de bioseguridad como evitar la manipulación de plantas sin guantes, lavarse las manos antes y después de la llegada y a la salida de la parcela, usar accesorios y ropas desinfectadas, evitar el acceso a personas ajenas al cultivo.
La enfermedad se propaga rápidamente y se caracteriza por manchas y puntos amarillos en los frutos, manchas marrones y estrechamiento de hojas y un enanismo generalizado en las plantas de tomate.