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ASUNCIÓN.- Un día después de haber presentado chicanas para evitar su audiencia de imposición de medidas, la exdiputada Rocío Casco, imputada por el escándalo de la supuesta caja paralela que existía en la Municipalidad de Asunción, recurrió a los medios de prensa para tratar de estafador a su denunciante y excorreligionario, Camilo Soares.
Casco está imputada por tráfico de influencias, coacción y coacción grave, y ayer debía comparecer para la imposición de medidas, pero su abogado, Álvaro Arias, presentó una chicana que hizo suspender la audiencia.
En lugar de defenderse ante los estrados judiciales, la exdiputada decidió utilizar a los medios para atacar a Soares, a quien calificó de estafador y mentiroso. Como ocurre con muchos opositores, recurrió a la famosa muletilla de culpar de todo al expresidente Horacio Cartes, con quien vinculó a su denunciante.
“Camilo Soares es un mercenario. Aprendió a actuar de forma mafiosa, pero finalmente él es un peoncito de sus patrones”, dijo Casco en una entrevista radial.
Dijo que durante la campaña electoral que postulaba a Mario Ferreiro a la Presidencia de la República para los comicios del 2013, la concertación Avanza País recibió dinero que, pensaron, provenía de personas que adquirían bonos por montos mínimos, pero resultó que eran del mismo Soares, quien “actuaba como usurero”.
“Finalmente, todo el dinero era de él y las personas no existían. Al final él era el dueño de todo y yo firmaba pagarés con Adolfo Ferreiro y de eso se pagaba un interés promedio de 2,5%”, aseguró.
