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ASUNCIÓN.- El senador colorado Gustavo Alfonso denunció la complicidad de los medios de comunicación propiedad de Aldo Zuccolillo y Antonio J. Vierci con el grupo de 23 revoltosos que pretenden atentar o hacer un golpe de Estado contra Horacio Cartes. Lo cierto es que el dueño de ABC Color tiene experiencia organizando golpes que terminan fracasando.
Lo que hizo Pipo Alfonso es decir en voz alta lo que hace tiempo se sabe, que los medios de estos 2 empresarios están metidos en una conspiración en contra del gobierno con el único objetivo de hacer que Cartes sea sacado de la Presidencia de la República.
El legislador se refirió a la postura asumida por los diarios ABC Color y Última Hora, que han decidido ridiculizar las denuncias sobre un complot de los senadores para asesinar o derrocar a Cartes.
Aseguró que “hay complicidad muy grande por parte de Aldo Zuccolillo y de Antonio J. Vierci, para que esto no adquiera la dimensión que debe de tener; esto es un escándalo aquí y en cualquier parte, y las consecuencias de esto no pueden quedar en el olvido”.
Así como dieron grandes espacios a las denuncias sobre supuestas irregularidades en las planillas de firmas proenmienda, desde que surgió la conversación de los 23 senadores en un grupo de Whatsapp, los matutinos mencionados se dedicaron a minimizar los hechos, aunque en cualquier país serio algo de esta naturaleza conllevaría un verdadero escándalo que sacudiría los cimientos más profundos de la política criolla.
GOLPISTA FRUSTRADO
Vierci debe estar haciendo algún curso rápido con su rival de negocios, pero socio en sus objetivos, puesto que Zuccolillo tiene experiencia como golpista, ya que en el 2000 estuvo, junto con los liberales Alfredo Jaeggli y Hermes Rafael Saguier, detrás del intento de levantamiento militar en contra del entonces presidente Luis Ángel González Macchi.
Ese golpe falló pero, por lo visto, Zuccolillo se quedó con las ganas de tener en su currículum el mérito de haber derrocado a un presidente; así que ahora intenta lo mismo con Cartes, aunque habría que advertirle que se prepara para otra derrota.
