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ASUNCIÓN. “¡Estamos por mal camino! Este Gobierno endeudó al país en más de 3.000 millones de dólares, aumentó el pago de impuestos (IRP e IDU) y no hizo nada para reducir la evasión fiscal, ni para reformar el Estado. ¡Es caro ser legal y no recibir servicios públicos de calidad!”, manifestó hoy el senador patriaqueridista, Stephan Rasmussen.

El tema de la presunta Reforma del Estado surgió con fuerza después de la llegada de la pandemia covid al país, sobre todo por la necesidad de mejorar el gasto público y de ahí contar con fondos para auxiliar a las Mipymes y sostener a los sectores menos favorecidos, impactados de lleno por la cuarentena sanitaria en su fase más dura.

Hasta ahora, toda esta discusión no pasó del debate, aunque el Poder Ejecutivo presentó un proyecto que apuntan a la optimización de la carrera del servidor público y, por extensión, mejora del gasto duro en remuneraciones.

“Urge un consenso político para mejorar el gasto público: función pública, estatuto docente, Salud, jubilaciones, Contrataciones Públicas. Más deuda y más impuestos ya se aprobaron, falta mejorar servicios públicos. No hay voluntad política para las reformas necesarias”, añadió Rasmussen en tono de denuncia.

Hace seis días, el nuevo ministro de Hacienda, Oscar Llamosas, señalaba que “sí se viene trabajando con varias propuestas de reforma”. Las principales líneas serían una mejor distribución del gasto público, actualizar procesos de compras públicas, avanzar hacia una reforma de la estructura del Estado, “madurar la Ley Tributaria” y seguir con la formalización.

El mismo día, la vice ministra de Economía, Carmen Marín, señalaba que “es crucial avanzar hacia una cuantificación multidimensional de la pobreza y acelerar las reformas como la transformación educativa, de manera de mejorar la calidad de vida de nuestros compatriotas.”