Se inició hoy el Novenario a la Virgen de Caacupé y la misa estuvo a cargo del obispo de San Juan Bautista, Pedro Collar Noguera, quien centró su sermón en una dura crítica a políticos, corrupción y violencia.
“Ante la dura realidad de corrupción generalizada, divisiones, injusticias, violencia, narcotráfico, trata de personas, abusos de poder, maltrato a la casa común y muchas otras situaciones, urge la misión de los laicos y que se lleve a un compromiso concreto por el bien de la sociedad, del país y la humanidad”, comentó el obispo.
Grandeza política implica que en momentos difíciles se obre con principios y por el bien común a largo plazo, dijo Collar, quien añadió que “al poder político le cuesta mucho asumir este deber y más aún en un proyecto común para la comunidad presente y futura”.
“Tenemos que encontrarnos con Dios y caminar juntos como familia, comunidad, como parroquia y como país. Es importante comenzar a interesarnos más los unos a los otros y tratar de cultivar la cercanía entre nosotros”, manifestó.
Aseguró además que “todos nosotros venimos a la Virgen de Caacupé con alguna necesidad. ¿Quién no pasa necesidad, especialmente después de esta pandemia? Nosotros constantemente estamos llamados por el médico Jesús para curar nuestras heridas y solo en el encuentro con Él lo podemos lograr”.