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ASUNCIÓN. Hasta hoy se realizan teleconsultas médicas en el Instituto de Previsión Social, medida adoptada para evitar aglomeraciones en el hospital central y las clínicas periféricas a causa de la pandemia del Covid-19.
Ante la constante disminución de casos positivos y fallecidos a causa del virus, hay una sensación de triunfalismo que asusta a muchos analistas, que ven en esto un relajo que puede hacer que una tercera ola nos encuentre con la guardia baja.
El problema es que este relajo no es solamente de la ciudadanía sino también de autoridades sanitarias, que actúan como si la guerra hubiera terminado con nuestro triunfo. Esto es lo que parece con la decisión adoptada por la Gerencia de Salud del IPS, que decidió que a partir de mañana todas las consultas sean presenciales, aun cuando esté más que comprobado que la cantidad de asegurados que acuden a la previsional diariamente para consultar implica siempre una aglomeración.
Además, la teleconsulta facilitó mucho las cosas a asegurados que tienen imposibilidad de trasladarse hasta alguno de los centros asistenciales del IPS, a veces por la misma enfermedad que les aqueja.
Pero así son las cosas y desde el 1 de septiembre, las consultas serán presenciales. Quienes ya habían agendado previamente teleconsultas deberán acudir presencialmente el día que quedó marcado, junto a su médico, en el hospital respectivo.
