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ASUNCIÓN. El ministro de la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD), Jalil Rachid, reveló este martes detalles sobre la persecución a Felipe Santiago Acosta Riveros, alias “Macho”, líder de una peligrosa banda criminal dedicada al tráfico de drogas. Rachid informó sobre los recientes golpes a la estructura logística de la banda, destacando la participación de un inusual “ejército” de indígenas al servicio de los criminales.
El operativo denominado “Ignis” ya dejó un saldo de 9 abatidos y 10 detenidos, además del desmantelamiento de elementos clave de infraestructura y logística utilizados por la banda. En entrevista con la emisora 730 AM, Rachid expresó que están atacando a “Macho” en la “cuestión logística”, golpeando donde más le duele a la organización criminal.
Dijo que durante el procedimiento del sábado pasado, se confirmó la existencia de un “ejército” de indígenas que operan como fuerza de trabajo para la banda. Su papel va más allá de la siembra, cosecha y procesamiento de marihuana, extendiéndose a funciones de seguridad, incluyendo la interrupción de operativos de las autoridades, como el incendio intencional de un puente de madera que conducía a una de las guaridas de los criminales.
Este modus operandi, similar al utilizado por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), llamó la atención de las autoridades. Sin embargo, a diferencia del EPP, la banda de “Macho” cuenta con armamentos más sofisticados, incluyendo equipos antiaéreos y equipamientos similares a grupos tácticos de las Fuerzas Armadas. Los indígenas, además de realizar funciones operativas, aportan un profundo conocimiento de las zonas boscosas de Canindeyú y otros departamentos fronterizos, facilitando las actividades ilícitas de la banda criminal.
