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Miles de personas se movilizaron ayer en las 23 capitales de Venezuela para exigir al poder electoral celeridad en el referendo revocatorio que la opositora Mesa de la Unidad Democrática espera impulsar este año contra Nicolás Maduro. El régimen chavista también realizó movilizaciones para contrarrestar la marcha opositora.
CARACAS.- Los manifestantes al grito “referendo ya” avanzan pese al fuerte despliegue de las fuerzas de seguridad, que con unidades antimotines han bloqueado el acceso hacia las oficinas regionales del poder electoral.
El secretario ejecutivo de la alianza opositora, Jesús Torrealba, dijo a la prensa que con las protestas pacíficas de la oposición espera consolidar su conexión con los habitantes del interior del país, y llevarles el mensaje sobre las exigencias que están planteando para la recolección de las firmas del 20% de los electores.
“Nuestra estrategia es aislar, segregar y derrotar a la cúpula corrupta y violadora de derechos humanos que tiene en sus manos por ahora las palancas del gobierno”, indicó Torrealba al asegurar que la oposición insistirá en acelerar la construcción de una “solución electoral” a la crisis.
Los opositores han tenido que cambiar las rutas de las caminatas ante las concentraciones de “chavistas” que también se han movilizado en todo el país para defender la paz y la revolución bolivariana.
Desde Los Teques, capital del céntrico estado Miranda, Rafael Guzmán, diputado por la Unidad Democrática, afirmó que el pueblo unido exige en las calles la fecha y las condiciones para la recolección de las casi 4 millones de firmas, 20% del registro electoral y poder activar el referendo revocatorio presidencial.
A su vez la parlamentaria Delsa Solórzano ante la presenciade un grupo de motorizados afectos al oficialismo aseveró que “nadie va confrontar porque esa Fuerza Armada que está así como los empleados públicos que movilizaron hoy también quieren el revocatorio”.
En tanto en la sede del CNE Caracas, Lilian Tintori, esposa del líder encarcelado Leopoldo López, junto a otras esposas de los llamados presos políticos fueron desalojadas a la fuerza por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana en momentos en que pretendían unirse desde ahí a la protesta cívica que por 10 minutos después del mediodía convocó la oposición en la capital venezolana.
