ADN Digital
Artículos relacionados
Los únicos que no se enteraron de que Venezuela no solo no preside sino que está suspendido del Mercosur, son el presidente Nicolás Maduro y su canciller, Delcy Rodríguez, quien desde su cuenta de Twitter rechaza las resoluciones del bloque e insiste en que es su país el que tiene la Presidencia Pro Tempore. Lo único que están consiguiendo es quedar en ridículo ante toda la comunidad internacional.
ASUNCIÓN.- Más que nunca, el delirio de Maduro y su gobierno ha quedado expuesto ante el mundo. Los miembros del Mercosur no permitieron que Venezuela asumiera la Presidencia Pro Tempore del bloque, a instancias de Paraguay, sencillamente porque el gobierno del país caribeño no se había adaptado a la cláusula democrática, considerada fundamental por los países miembros.
Cuando esto ocurrió, se descubrió que, en realidad, Venezuela no había firmado ninguna de las cláusulas importantes del Mercosur, por lo que en ningún momento fue socio pleno aunque haya actuado como tal durante años. Así que se le puso un plazo perentorio a Maduro para que se adecue al bloque si pretendía seguir perteneciendo a él.
Este plazo venció el pasado 1 de diciembre, y, por supuesto, el gobierno venezolano no intentó siquiera simular que tenía intención de obedecer por lo que Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay –los socios reales y originales- decidieron suspender a Venezuela, por lo menos provisoriamente y dicha suspensión no se levantará hasta que Maduro cambie su sistema de gobierno o los venezolanos se libren de él.
En esa misma reunión, los países miembros decidieron que la Presidencia del bloque pasara a Argentina, cumpliendo con el requisito de que los traspasos se realizaran alfabéticamente.
Y fue en ese momento cuando la locura de Maduro y su canciller llegó a su punto máximo. Rodríguez utiliza su cuenta en Twitter para gritar que la Presidencia del Mercosur es de Venezuela y que lo hecho con Argentina es solamente un circo sin ningún valor.
Como no tiene ningún espacio oficial para hacerlo porque no hay un solo país que se solidarice con sus aspiraciones, Delcy emite comunicados que da a conocer a través de las redes sociales, como cuando fue agredida una diputada argentina o la muerte de un embajador ruso. Lo único que consiguen es que la comunidad internacional se burle de ellos y lo paga su pobre país.
