Artículos relacionados

ASUNCIÓN. Todavía continúan las repercusiones de la elección de las mesas directivas del Senado y Diputados, que asumirán en funciones el próximo 1 de julio, día en la que el presidente de la República debe presentar su rendición de cuentas ante la ciudadanía.

En Diputados, legisladores oficialistas pertenecientes al sector samanieguista cuestionaron que el presidente de la República decidiera apoyar la reelección del cartista Pedro Alliana, yendo en contra de Arnaldo Samaniego, a pesar de ser “chancho de su propio chiquero”.

En el Senado también algunos oficialistas molestos por la forma cómo se dieron las cosas con la elección de Óscar “Cachito” Salomón, con apoyo de la oposición, vieron la mano de Abdo Benítez detrás.

Sin embargo, el jefe del Gabinete Civil de la Presidencia, Juan Ernesto Villamayor, negó cualquier tipo de injerencia del Ejecutivo en la elección de las mesas directivas del Congreso, y dijo que al presidente no le preocupa que la bancada añetete se haya dividido en el Senado, aunque también ocurrió lo mismo en Diputados.

Esa misma tranquilidad no se siente en la bancada oficialista de la Cámara Alta. Silvio Ovelar cuestionó que no se hubiera conversado primero entre colorados antes de buscar acuerdos fuera del bloque oficialista, y dijo desear que lo ocurrido no afecte el proceso de unidad conocido como “operativo cicatriz”, porque el partido necesita la cohesión de todos los sectores.