ADN Digital
Artículos relacionados
Es alarmante la cantidad de presos sin condena en nuestro país. Blas Martínez, director general de establecimientos penitenciarios, explicó que en todo el país existen 18 sedes penitenciarias y albergan a 14.604 reclusos, de los cuales están 10 mil hombres procesados y 3.457 condenados. Mientras 324 mujeres están procesadas y 341 condenadas, que equivale a que el 78% de los recluidos no está condenado.
ASUNCIÓN.- Blas Martínez indicó que las principales causales de la superpoblación de las cárceles son los abusos de la prisión preventiva y la violencia intrafamiliar. Asimismo, lamentó el poco interés del Poder Judicial para agilizar los procesos de las personas que ya cumplieron con el tiempo de estar privadas de su libertad, para que puedan volver a sus hogares.
Mencionó también que se realizan muy pocos juicios orales, mientras que algunos no tienen abogado y los que tienen, no mueven los expedientes.
Comentó que solo en la penitenciaría de Tacumbú están recibiendo diariamente entre 20 a 15 personas privadas de su libertad. “Eso, suma cerrando la semana y ni que decir el mes; y solo tenemos 18 lugares de reclusión”, acotó.
Para paliar la situación sostuvo que “se está proyectando la construcción de cuatro nuevas penitenciarías, porque el abultado número de delincuentes, que está ingresando, está creando serios problemas. Entre los principales está la falta de espacios físicos y tampoco se puede realizar la clasificación por los ilícitos cometidos”.
Entre los lugares, donde deberán construirse las cárceles, mencionó a Minga Guazú (Alto Paraná), Itaguá (Dpto. Central) y dos en Emboscada (Dpto. de Cordillera). En este último, la meta es descongestionar Tacumbú.
Recordó que tuvieron que habilitar nuevamente la cárcel de Tacumbú, porque es muy lejos enviarle a la gente a Misiones y Encarnación. “Prácticamente estamos haciendo malabares para resolver el tema del hacinamiento”, sostuvo.
Asimismo, dijo que en la actualidad existen centenares de personas con prisión domiciliaria. Además que las asesorías jurídicas son las que más ayudan a los reos para que sus expedientes sean movidos en los juzgados. “La mayoría de los reclusos son de escasos recursos y son defendidos por los defensores públicos, que llevan muchos casos y no pueden abarcar todo”, concluyó Martínez.
