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PEDRO JUAN CABALLERO. El director de Policía del Amambay, el Crio. Ignacio Muñoz, señaló que una persona cercana al presunto narco asesinado, Clemencio González, conocido como “Gringo”, podría haber sido quien lo traicionó, entregándolo a un adversario en Pedro Juan Caballero. González fue asesinado ayer por un grupo de posibles sicarios que le propinaron más de 70 disparos de fusil, en un inquilinato en la capital del departamento de Amambay.
El Crio. Muñoz destacó que “Gringo” era una figura notoria en el submundo criminal, con múltiples enemigos que buscaban su eliminación. El presunto narcotraficante mantenía un perfil sigiloso y se ocultaba cuando su vida corría peligro. Sin embargo, su escondite fue descubierto, lo que sugiere la intervención de una persona cercana que proporcionó información sobre su paradero.
“Los que le conocen le tenían respeto, pero también temor por lo que él era. A pesar de tener amenazas optó quedarse en ese inquilinato de manera precaria, muy pocas personas llegaban hasta ahí”, destacó el uniformado.
Acotó que “él se mantenía cerrado en su mundo, era una persona peligrosa en el submundo y no tenía apuros para llevar a ajustar las cuentas pendientes con sus adversarios porque tarde o temprano hace llegar su mensaje a ellos”.
El comisario también señaló que el asesinato de González podría estar relacionado con la rivalidad que mantenía con diversos criminales en la región y que se agudizó tras la muerte de su hijo. “En septiembre del año pasado, cuando fue asesinado su hijo en la vía pública, se empezaron a agudizar las amenazas de él y de otras personas referentes del submundo de negocios en Pedro Juan Caballero y parte de Amambay”, enfatizó. “Tenía algunas amenazas latentes que se recabó gracias al trabajo de Inteligencia. Hace un buen tiempo permanecía latente una amenaza entre él y su contrincante”, añadió.
