ADN Digital
Artículos relacionados
CIUDAD PRESIDENTE FRANCO. Una humilde mujer denunció que es víctima de una serie de artimañas por parte de exautoridades municipales, quienes pretendieron quedarse con un inmueble donde su padre, excombatiente de la Guerra del Chaco, actualmente fallecido, vivió con su familia por más de 40 años.
La afectada, identificada como Idalina González, de 47 años, relata pormenorizadamente al Ministerio Público cómo exintendentes, sus familiares y funcionarios municipales falsificaron documentos y utilizaron a personas para apoderarse de la tierra de más de una hectárea.
El inmueble en cuestión está ubicado en el barrio San Francisco (Tres Fronteras) de Presidente Franco, zona sur-Urbana, con padrón Matriz 141 y finca 60, según la denuncia presentada por la mujer por tráfico de influencia, asociación criminal, estafa, producción de documentos públicos de contenido falso y otros.
Idalalina cuenta que nació en el lugar en el año 1973. Su padre, don Filomeno González Núñez, excombatiente de la guerra del Chaco, falleció en el 2000. La denunciante, afirma, que nunca dejó de residir en el lugar. Actualmente vive junto a su esposo Fulgencio Casco, sus 3 hijos menores, y uno de sus hermanos, ya que otro falleció.
Refiere que el 2 de mayo de 1995, su padre había solicitado al entonces intendente Reinerio Santacruz, el arrendamiento del inmueble al cumplir con los requisitos (como mínimo 2 años de ocupación). Supuestamente los documentos se extraviaron. Pero los ocupantes tienen en su poder la copia simple del expediente, donde obra un informe pericial de fecha 18 de agosto de 1989 y el plano del terreno, entre otros. Afirma que su padre vivió en el lugar desde 1960, es decir, 40 años, hasta su fallecimiento en el 2000.
Sigue contando que en el 2012 se constituyeron en su domicilio el entonces intendente Miguel Medina (actualmente fallecido) y otros funcionarios, quienes le ofrecieron ayuda para regularizar los documentos del inmueble y su consecuente titulación. Aceptó el ofrecimiento, pero la mujer aclara que es analfabeta funcional. Posterior a esa visita, el entonces jefe comunal convocó a Idalina en su despacho, donde le hizo firmar en varias ocasiones una serie de documentos, argumentando que era solo para regularizar y titular el inmueble.
González recordó que en agosto del 2012, surge una resolución firmada por Miguel Medina y el entonces secretario municipal, Feliciano Bogado, en la cual conceden el arrendamiento de la propiedad a José David Grasel Báez. El documento igualmente estaba firmado por la abogada Blanca Acuña, como presidenta de la Junta Municipal.
Lo curioso es que Grasel nunca vivió ni un solo día en el lugar, es decir, en el terreno de la familia, lo cual demuestra que en contubernio con las autoridades de turno, produjeron documentos de manera fraudulenta, todo con el propósito de despojar a los herederos del excombatiente de su inmueble, según la denuncia. Agrega que además en la resolución a favor de Grasel señala la obligación de construir un tinglado de 800 m2 en el lugar, incluso ya aprobado por el Departamento de Obras y Urbanismo de la institución municipal. Refiere que el beneficiario nunca pisó el terreno. “En la resolución incluso hicieron figurar que supuestamente pagó la suma de 1.440.000 Gs., según factura Nro. 560429, como importe a la construcción de obra que nunca se realizó…”.
La denunciante destaca además que, para colmo, en fecha 18 de diciembre del 2013, aparece una resolución de la Junta Municipal por el cual se adjudica la propiedad en carácter de venta a favor de Diego Miguel Medina Otazu, hijo del fallecido exintendente Medina.
Dicha resolución fue firmada por el entonces intendente Alcides Fernández. Aún más indignante, conforme a la denuncia, es que aparece que Diego Medina volvió a vender la propiedad a Alcides Fernández.
La mujer refiere que “con el tiempo pudo averiguar que Grasel es del distrito de Juan E. O’Leary y empleado del (entonces) intendente Medina en su playa de venta de vehículos”. Igualmente, tuvo la oportunidad de dialogar con él y éste le dijo que desconocía el tema del inmueble, pero que en una oportunidad le pidieron supuestamente prestado su cédula de identidad para ayudar a una familia. Grasel incluso se presentó a manifestar todo esto ante una escribanía, refiere la mujer.
Sus declaraciones habrían sido que “sin saber fue parte de un esquema montado por la autoridad de turno de la Municipalidad de Presidente Franco, en especial del extinto intendente municipal, Miguel Ángel Medina Mauro”.
La denuncia ya está en el Ministerio Público y la familia pide justicia para poder vivir en paz en la casa que fue habitada desde el inicio por el excombatiente, así como por sus hijos, puntualiza la mujer.
