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ASUNCIÓN. Como si el Covid-19 hubiera dejado de existir, sin tener en cuenta que sigue muriendo un promedio de 20 paraguayos por día a causa del virus, el Instituto de Previsión Social resolvió que desde hoy vuelvan las consultas presenciales en los hospitales y clínicas periféricas de todo el país, y ocurrió lo que siempre ha ocurrido con la previsional, que la gente acudió en masa para su consulta y se produjo mucha aglomeración y desorden en los centros sanitarios.
Ayer habíamos advertido desde este diario que la suspensión de las teleconsultas y la rehabilitación de las consultas presenciales generaría caos y no se justificaba puesto que, a pesar de la disminución de casos de Covid-19, este virus no había sido aún vencido, mucho menos con el escaso número de ciudadanos que han completado el esquema de inmunización.
La cantidad de asegurados que tiene el IPS siempre generó mucha aglomeración en sus centros de atención, así que no es de extrañar que hoy, en el presunto retorno a la “normalidad”, haya ocurrido lo mismo. Esto indignó a los asegurados, que, al parecer, son más conscientes que las autoridades de la previsional y cuestionaron que por tener que recurrir a la consulta médica se exponen a la posibilidad de contagio, mucho más en este momento que está confirmada la circulación de la variante delta en el territorio nacional.
