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En una rápida sesión de menos de una hora, el Senado dio media sanción al proyecto que crea la Superintendencia de Jubilaciones y Pensiones, con mínimas modificaciones y casi sin ninguna discusión.
La convocatoria a sesión extra pilló por sorpresa a muchos, ya que se pensaba que el tema no sería tratado hasta la vuelta del receso parlamentario en marzo del próximo año. Sin embargo, todo indica que la intención de la ANR es que la ley quede sancionada este año, por lo que rápidamente se remitirá a Diputados, a fin de que lo trate antes del 20 de diciembre.
Fueron 25 los senadores que dieron quórum, entre ellos 4 liberales y Yolanda Paredes, de Cruzada Nacional, quien afirmó que se había quedado para evitar que los colorados tuvieran el arco libre. Tanto ella como la encuentrista Kattya González (quien entró un momento a la sesión) fueron las únicas que manifestaron su rechazo al proyecto.
La aprobación en general se hizo rápidamente y el tratamiento en particular no llevó demasiado tiempo ya que no se votó artículo por artículo sino capítulo por capítulo y en la mayoría de ellos, Basilio Núñez pidió cierre de la lista de oradores.
Ni bien terminó la sesión del Senado, se produjeron incidentes fuera del Congreso, en donde se encontraban apostados manifestantes de diversos sectores, especialmente de trabajadores, pero terminaron rápidamente por una represión policial, que culminó con algunos heridos y otros detenidos.
Mientras quienes estaban a favor de la ley afirmaban que con ella se garantizaba la protección de los fondos jubilatorios, sus detractores (específicamente Paredes) pedían al presidente Santiago Peña que evite el despojo del dinero de los jubilados.
Diputados dará entrada al proyecto en su sesión ordinaria de mañana, y algunos ya analizan la posibilidad de que pudiera ser tratado sobre tablas, el mismo día.
