Artículos relacionados

ASUNCIÓN. Retornaron a la Plaza de Armas los indígenas que fueron desalojados para la final de la Copa Sudamericana y la gente cuestiona que la Policía aparente de brazos cruzados, sin tomar medidas para que este espacio, ubicado frente al Congreso, se encuentre libre de ocupaciones.

El ministro del Interior, Euclides Acevedo, dio dos motivos para que esto ocurriera, que la plaza es un espacio público por lo que puede ser ocupada y que para desalojar a los indígenas, la Policía necesita una orden judicial.

El secretario de Estado señaló que “siempre hay la eterna y bizantina discusión de si la plaza es del Estado o de la Municipalidad, cuando en realidad es de la ciudadanía toda”.

Son unas 25 familias de la parcialidad Ava Guaraní, comunidad Ka’a Poty, las que se volvieron a instalar en la plaza, exigiendo tierras en Mariscal López, Departamento de Caaguazú, en donde están desde hace años, ubicados por el Indi, pero que ahora no pueden ocupar porque hay conflicto con productores brasileños.

Acevedo dijo que sin orden judicial no serán desalojados y que, de todos modos, conversará con el comandante de la Policía Nacional para ver “qué recursos jurídicos blindados tenemos, porque a la hora de la verdad el trabajo sucio lo hace la Policía”.

“Si vamos a hacer un desalojo es por orden judicial y por orientación e intervención fiscal, una cosa es ocupar plazas y otra destruirla”, insistió.