WASHINGTON. Casi tres semanas después de las elecciones presidenciales, el proceso de transición de poder en Estados Unidos entre el gobierno saliente de Donald Trump y el mandatario electo Joe Biden finalmente podrá iniciarse.
Emily Murphy, responsable de la Administración de Servicios Generales del gobierno federal (GSA por sus siglas en inglés), envío este lunes por la tarde una carta a Biden informándole que pondrá a su disposición los recursos necesarios para el inicio formal de la transmisión de poder.
Murphy había sido duramente cuestionada por haber obstaculizado el acceso de miembros del equipo de Biden a fondos e instalaciones federales, algo que sus críticos vieron como un intento de retardar la transición.
En un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, el presidente Donald Trump reveló que el cambio de posición de la GSA tiene su visto bueno.
“(Pensando) en el mejor interés de nuestro país, estoy recomendando que Emily y su equipo hagan lo que necesite ser hecho en relación con los protocolos iniciales y le he dicho a mi equipo que haga lo mismo”, escribió el mandatario.
El mandatario aún no ha concebido formalmente ni reconocido la derrota en las elecciones del 3 de noviembre.
De hecho, en el mismo mensaje en el que informa sobre su visto bueno para el inicio de la transición indica que seguirá impugnando los resultados electorales.
“Nuestro caso continúa con fuerza. Vamos a seguir dando una buena pelea y creo que vamos a vencer”, afirma.
I want to thank Emily Murphy at GSA for her steadfast dedication and loyalty to our Country. She has been harassed, threatened, and abused – and I do not want to see this happen to her, her family, or employees of GSA. Our case STRONGLY continues, we will keep up the good…
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 23 de noviembre de 2020