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El informe de gestión presentado por el presidente Horacio Cartes ante el Congreso, en el inicio del período legislativo, ha cubierto todas las áreas en las que trabajó el gobierno en este último año y lo ha hecho sin literatura, dando números reales y fáciles de comprobar, por lo que nadie puede dudar de la veracidad de los datos.
Además de las cifras del resultado de trabajo en todas las áreas, lo que quedó claro es que el jefe de Estado se ratifica como intolerante ante la dilapidación de los fondos públicos, los funcionarios que, en realidad, son operadores políticos y la corrupción del viejo sistema que pretende seguir manejando las riendas del país.
Tuvo palabras muy duras para los gobiernos que estuvieron del 2003 hasta el 2013, Nicanor Duarte Frutos, Fernando Lugo y Federico Franco, y les culpó por no haber invertido en la gente en lugar de gastar el dinero público en estructuras políticas. “Los ingresos adicionales que el sector privado generó durante los 10 años de crecimiento económico, fueron dilapidados por aquellos que contrataron funcionarios, no para servir al pueblo sino para construir estructuras electorales”, dijo.
En cuanto a las acciones del gobierno durante este último año, resaltó que SENAVITAT, al 31 de diciembre de 2015, había entregado 10.207 casas en ese ejercicio, con una ejecución presupuestaria de 535.000 millones de guaraníes, la más alta de la historia de la institución.
Otros números hablan de que se han recuperado más de 70 mil hectáreas de tierras fiscales mal habidas, algo absolutamente inédito en el país, ya que ningún otro gobierno había recuperado siquiera una sola hectárea para el Estado.
Se redujo el desempleo y se logró una tasa de ocupación del 94,2% en el Área Metropolitana de Asunción. En Salud, se ha invertido en medicamentos, telemedicina, equipos médicos y biomédicos y en mejorar la infraestructura de los hospitales a nivel país. Se habilitaron 53 unidades de terapia intensiva y las unidades de salud familiar crecieron de 867.000 atenciones en 2014, a 2.300.000 atenciones en 2015.
En cuanto a Educación, se llegó a tiempo con los útiles escolares en todo el país, se amplió el programa de almuerzo y merienda escolar y se dieron becas a más de 500 jóvenes para que estudien en universidades del exterior.
No olvidó de mencionar lo trabajado con el sector campesino y los pueblos originarios, para los cuales se han logrado grandes beneficios que les permiten acercarse a una vida digna, aunque reconoció que aún queda mucho por hacer.
Hay cosas que han quedado claras luego del informe de gestión del presidente Cartes, como su firme decisión de seguir luchando contra los planilleros en la Administración Pública y de trabajar durante este mandato por el país, sin ánimo de intentar hacer campaña política para el 2018.
Quedan dos años de gobierno, y para ese tiempo, el jefe de Estado dejó en claro cuál será su plan al enumerar las cuestiones fundamentales que aún faltan: hogar digno para más de 180 mil familias, capacitación y apoyo tecnológico para el sector campesino, sistema de transporte eficiente, acceso a una educación de calidad en infraestructura y contenido para los niños paraguayos y un sistema de salud con las prestaciones básicas para todos los paraguayos.
Contundente y claro. Basado en números apoyados en la realidad. Difícil de rebatir. Quizás por eso muchos opositores a ultranza hicieron sencillamente “mutis por el foro”…
