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CAACUPÉ.- Los últimos hechos de sicariatos y violencia que sufre el país denotan el ambiente de decadencia moral en el que vivimos, lamentó el obispo de Caacupé, Ricardo Valenzuela, quien pidió a los fieles a luchar por la paz verdadera.
“Según San Agustín, la paz es la tranquilidad del orden y las personas que ocupan su lugar y hacen lo que deben, ahí hay paz. Si se produce el desorden, se producen la intranquilidad, la discrepancia y la guerra”, dijo durante la homilía de la misa en la Basílica.
Añadió que “la paz interior consiste en la orientación tranquila y estable de todas nuestras tendencias y deseos a Dios, quien es el orientador de todo lo que existe. Pero todo desaparece cuando la voluntad del hombre, en contra de la razón, se desvía de Dios y de su voluntad y va en busca de lo material que ofrece el mundo”.
Monseñor Valenzuela aseguró que “estamos en un ambiente de decadencia moral, por la deshonestidad y la falta de ideales. Estamos sometidos a los vaivenes del mundo”, aludiendo a los últimos asesinatos realizados por sicarios, al fiscal Marcelo Pecci y al intendente de Pedro Juan Caballero, José Carlos Acevedo. Y agregó el caso de la niña de 3 años que en Caaguazú fue asesinada a golpes por su padrastro.
Se refirió también a la amenaza de tiroteo y denuncias de abusos sexuales en colegios, y añadió que “esto nos hace pensar que la pesadilla ya comenzó. ¿Qué será lo que se viene más adelante?”.
