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ASUNCIÓN. El presidente de la Sociedad Paraguaya de Neumología y médico del Ineram, doctor José Fusillo, no coincide con algunos representantes de Salud Pública que dicen que gracias a las medidas restrictivas impuestas en Semana Santa en estos días se notará una disminución de los contagios.
“Realmente el cumplimiento, no sé si fue óptimo, yo no lo vi así, no lo sentí. La circulación de las personas estuvo igual de alta que en Semanas Santas anteriores. Además, las restricciones parciales por 7 días pueden tener un impacto pero no grande. Debe ser la cuarentena más prolongada, pero eso hoy, en el plano económico, es imposible de sostener”, dijo en Tempranísimo, por la 970 y GEN.
Añadió que “hoy se está priorizando mantener el costo político y eso va a afectar al costo sanitario, que a la larga también va a tener un costo político. Se sigue cargando el peso más importante en los hospitales y en el trabajador de blanco que ya está agotado. Nos sentimos los médicos como la banda del Titanic; somos los que seguimos tocando mientras esto se está hundiendo”.
Consultado sobre la diferencia de criterios entre Brasil y México sobre la vacuna india Covaxin y el hecho de que hubiéramos hecho caso al dictamen de los mexicanos e ignorado el de nuestros vecinos, comentó que “México está con necesidad de vacunas; Covaxin tiene estudios de fase 3 con un 86% de efectividad. Hoy por hoy, Brasil no es un mejor ejemplo en la toma de decisiones en ninguna de las aristas de la pandemia”.
El Ineram está tan colapsado como el resto de los hospitales del sistema sanitario, comentó Fusillo, diciendo que “ya venimos estando así hace más de un mes, situación de saturación y colapso que venimos arrastrando. Elabellón nuevo quedó absolutamente insuficiente, estamos tratando de habilitar otro espacio. Hoy tenemos como 10 pacientes en sillones, sillas, es nuestra realidad, lo que afrontamos día a día. Es complicado decirle a las familias que te piden un lugar para el papá, la mamá, una silla aunque sea, y es tremendo tener que decir que no”.
Refiriéndose a la nueva corriente que da un papel fundamental a la transmisión del Covid-19 por aerosol, el profesional dijo que “hoy en día es más importante la ventilación que la desinfección. La ventilación ha adquirido una preponderancia muy superior; si decidimos ir a un lugar tenemos que ver cómo está ventilado. El enemigo son los espacios cerrados y no ventilados.
