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Organismos de seguridad, inteligencia, y fiscalización del Brasil iniciaron la “Operación frontera Integrada”, en la zona fronteriza con el Paraguay. Argumentan que las acciones son para combatir los crímenes transnacionales en esta parte del continente. Pero con el operativo volvió el cerrojo brasileño sobre la actividad comercial de Ciudad del Este, que es la más afectada. Esto ocurre justo cuando iba en aumento la presencia de turistas y sacoleiros y hay signos de recuperación del sector.

CIUDAD DEL ESTE.- Un numeroso contingente, conformado por fiscales de la Receita Federal (Secretaría de Ingresos Federales), efectivos policiales del Batallón de Frontera de la Policía Militar, agentes de la Policía Federal, realizaba un minucioso control en la cabecera brasileña del Puente de la Amistad. Esto no se veía hace un buen tiempo.

Todos los vehículos y personas que ingresaban a territorio brasileño desde el Paraguay eran sometidos a un riguroso control. Debido a esto se formó largas filas en suelo paraguayo. Los efectivos policiales usan perros amaestrados de la Policía Militar y de la Policía Federal.

Se informó que los controles y la fiscalización fue reforzada en el marco de la Operación Frontera Integrada. Los organismos que participan de los procedimientos son efectivos militares, policiales militares, agentes de la Policía Federal, de la Policía Rodoviaria Federal, de la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN), Policía Civil, Policía Municipal de Foz, Departamento de Inteligencia del Estado de Paraná, además de los fiscales de la Receita.

El argumento de estos procedimientos, como siempre, es combatir las actividades ilegales transfronteriza como ser el contrabando, el tráfico de drogas y armas.

Sin embargo, cuando se inician este tipo de controles inmediatamente las actividades ilegales cesan, y el procedimiento continúa afectando directamente al turismo de compra en la zona.

Estos operativos asfixian la actividad comercial en la zona Este del país.

Hace tiempo que no se veía un cerrojo de los brasileños sobre la actividad comercial en la frontera, indicaron comerciantes quienes ven con recelo esta nueva embestida de los brasileños.

El argumento de combatir las actividades ilícitas internacionales no convence mucho, atendiendo a que no hay ningún control en la frontera con la Argentina.

Los organismos de seguridad, inteligencia, y fiscalización del país vecino indicaron que el operativo se va a extender en la zona del río Paraná y el Lago de Itaipú. Precisaron que se detectó un aumento en el tráfico de drogas y armas en la zona.